Mediante una adición a la Constitución Política de Morelos y al artículo Cuarto de la Ley para la Protección del Menor, el Congreso local prohibió a los menores de edad participar en marchas o mítines, de lo contrario los padres de familia serán sancionados, sin precisarse cuáles serían los castigos.
La intención de los legisladores con la aprobación por mayoría es evitar que los menores “corran riesgos” o bien sean “utilizados como carne de cañón”, por parte de sus padres, tutores o de los adultos que dependan.
De tal manera, desde ayer el Poder Legislativo morelense agregó una adición al artículo Segundo constitucional, en su Párrafo Segundo, que se refiere a los riesgos a que no deben ser sujetos los menores de edad en el estado.
En cuanto a la adición al artículo Cuarto de la Ley para la Protección del Menor en la entidad, se agrega el inciso “I”, que prohíbe la participación en manifestaciones públicas porque exponen su integridad a riesgos físicos y psicológicos.
El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso local, Gabriel Pacheco Inclán, impulsor de las adiciones al marco del derecho, también propuso sanciones, pero olvidó redactarlas en la iniciativa debatida y aprobada ayer por 22 de los 30 legisladores morelenses.
La iniciativa fue tema de debate en la tribuna por parte de los ocho diputados del PRD, quienes sentenciaron que viola los artículos 6, 7 y 9 de la Constitución Política Mexicana, porque no puede coartarse a ningún mexicano el derecho de asociación, manifestación y expresión.
En todo caso, expuso el coordinador parlamentario perredista, Víctor Nájera Medina, deberá sancionarse a los representantes populares o servidores públicos que utilicen la violencia como arma para resolver los conflictos o problemas sociales.De esta manera, el legislador perredista Pedro Delgado Salgado dijo que con la adición legal en Morelos “se está caminando hacia un marco jurídico de restricción de las libertades individuales y colectivas”.
Organizaciones no gubernamentales como la Comisión Independiente de los Derechos Humanos en Morelos (CIDHM) protestaron contra la medida, por considerarla coercitiva no hacia los adultos, sino a los infantes, que también tienen derecho a la manifestación pública.
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